Adriana Karp advierte sobre la crítica situación de los auxiliares de la educación y reclama salarios dignos
La delegada local del gremio SOEME, Adriana Karp, dialogó con La Nueva Radio Suárez sobre la compleja realidad que atraviesan los auxiliares de la educación en el Distrito, en el marco de una crisis laboral profunda y salarios que no alcanzan a cubrir la canasta básica.
“Estamos en un plan de lucha constante”, afirmó Karp, tras la adhesión del sindicato al paro general convocado por la CGT el pasado 10 de abril. La representante gremial sostuvo que la situación salarial de los trabajadores es crítica y expresó que “nunca un salario puede estar por debajo de la canasta familiar básica”.
Con jornadas laborales de 30 horas semanales en promedio, los sueldos de los auxiliares no superan los 600 mil pesos. “Somos el eslabón más chico dentro de la cadena educativa y los más perjudicados” enfatizó, y remarcó que muchos trabajadores no pueden acceder a un segundo empleo por incompatibilidades o por la falta de oportunidades laborales.
Karp describió una escena preocupante: en los actos públicos se observan cada vez más personas buscando suplencias mínimas de apenas unos días. “Antes, las suplencias cortitas no se cubrían tan rápido. Hoy hay una desesperación muy grande por conseguir aunque sea eso, porque la desocupación ha crecido muchísimo”, contó.
Además, denunció la falta de creación de nuevos cargos, a pesar de que las necesidades de las instituciones educativas han crecido con la implementación de comedores y desayunos escolares. “Sí, hacen falta cargos, pero no se están creando. Desde el Consejo Escolar se reorganiza lo que hay, trasladando personal de escuelas rurales a urbanas, pero no alcanza”, advirtió.
Respecto a la situación interna del gremio, destacó que desde noviembre de 2023 SOEME cuenta con autoridades regularizadas y una Comisión Directiva que busca fortalecer las áreas de acción social, legales y de asistencia al afiliado. “Estamos bien plantados, pero golpeamos puertas y nos encontramos con techos. El aumento que recibimos este año fue de un 7% en febrero y un 2% en marzo. Eso no alcanza para nada”, lamentó.
Desde el sindicato intentan paliar la situación con beneficios para los afiliados: kits escolares, guardapolvos, cajas navideñas, regalos para el Día del Niño, anteojos gratuitos, coseguros de salud y reintegros en prácticas médicas. “Tratamos de contener, pero también queremos seguir creciendo para hacernos más fuertes frente al gobierno” dijo, subrayando que la fuerza del gremio también está en su cantidad de afiliados.
Finalmente, Adriana Karp aseguró que desde el frente gremial estatal FEGEPPBA se está pidiendo la urgente reapertura de paritarias para discutir una verdadera recomposición salarial.
“Esperamos que quienes trabajan puedan tener un salario digno. Esa es nuestra principal lucha”, concluyó.