Smurfit Westrock: nace un gigante en la industria de empaques sostenibles

Smurfit Kappa Group y WestRock Corporation, dos de los principales jugadores en la industria de los empaques sostenibles, anunciaron hoy su fusión, bajo el nombre Smurfit Westrock.

La operación se da en un entorno clave para el sector. Es que el auge del e-commerce exige empaques que garanticen la seguridad de los productos durante toda la cadena logística, a la vez que el creciente interés por el cuidado del ambiente pone el foco en soluciones biodegradables. “La combinación de Smurfit Kappa y WestRock crea un líder mundial en empaques sostenibles, uniendo la gran experiencia y conocimiento de ambas compañías,” señaló Tony Smurfit, CEO de Smurfit Westrock.

En tanto, Ken Bowles, CFO de la firma, consideró: “Los accionistas apoyaron de forma abrumadora nuestra combinación. Smurfit Westrock tiene una huella geográfica única y, a través de nuestras aplicaciones líderes en la industria, una capacidad inigualable para proporcionar valor a nuestros clientes”.

La compañía, proveedora de soluciones de empaque a base de papel y cartón corrugado para diversas industrias, como la agrícola, la de alimentos y bebidas, proteínas, limpieza y cuidado personal, vitivinícola y aceitera, entre otras, se apoya en un modelo de negocio circular, enfocado en la reducción tanto de carbono como de residuos. De acuerdo con referentes de la firma, los productos son fabricados con materia prima 100% renovable, reciclable y biodegradable. En la actualidad, por caso, el 85% de las soluciones de empaque producidas en la Argentina está conformado por fibras recicladas posconsumo.

Tras la fusión, Smurfit Westrock debutó el pasado lunes en Bolsa de Valores de Nueva York bajo el símbolo “SW”, y en la Bolsa de Valores de Londres bajo el símbolo “SWR”. Con presencia directa en 40 países, la compañía está integrada por más de 100.000 trabajadores.
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En el clúster conformado por la Argentina y Chile, la empresa cuenta con cinco centros de producción, ubicados en la provincia de Buenos Aires (en Bernal, Coronel Suárez y Laferrere), en Santa Fe (Sunchales) y en Santiago de Chile. Allí, alrededor de 1300 empleados trabajan mediante un modelo de negocio integrado, con un equipo y herramientas de innovación y diseño de escala global.

Casi tres décadas y una historia de adquisiciones

La historia de la empresa en el país data de 1997, cuando Jefferson Smurfit Group adquirió una fábrica de papel reciclado y otra de cartón corrugado en la localidad de Coronel Suárez. Posteriormente, en 1998, fue también por la operación de Corrugadora Coronda, situada en el sur de la Capital Federal. Y en el año 2000, la compañía comenzó una profunda etapa de adquisiciones que la posicionaron en el mercado local de soluciones de empaque a base de papel y cartón corrugado.

En junio de ese año adquirió “Fabricación Argentina de Cartón Corrugado y Afines” en la localidad de Sunchales, principal cuenca lechera del país, lo que le permitió acceder también al mercado de exportación de carnes y al de cítricos en el norte del país. Dos meses después se hizo de Molino de Papel, en la planta de Bernal, la planta de Corrugado de Cartonex Bernal y la planta de Corrugado de Cartonex Mendoza. Inmediatamente, fusionó la planta de Corrugadora Coronda con Cartonex Bernal, lo que permitió casi triplicar la capacidad de fabricación de papel.

Dos años más tarde, en 2002, la compañía inició sus operaciones comerciales en Chile, apoyada en las exportaciones desde la Argentina. En 2004, dio un paso más con la construcción de una planta en Lampa. Y el 2005 marcó un punto de inflexión: Jefferson Smurfit Group se fusionó con Kappa Packaging a nivel global.

Posteriormente, el Grupo Smurfit Kappa también adquirió Baguin, una compañía en la localidad de Pilar, productora de soluciones de empaque tipo Bag-in-box, lo que permitió ampliar el portafolio de productos. Y en 2022, incorporó a su cartera a Argencraft, con planta en Laferrere.

La Nación