“El lavado de manos salva vidas”: atención a las medidas de higiene para prevenir enfermedades intestinales, como Hepatitis A

En el marco de los temporales que han arrasado con tantas zonas de la región y dejó bajo agua a la ciudad de Bahía Blanca, aparece la preocupación por la posibilidad de contagio de enfermedades de transmisión fecal-oral como consecuencia de la falta de higiene.
Esther Hurtado, médica gastroenteróloga, extendió recomendaciones a la población que están vinculadas a la necesidad de consumo de agua potable y el correcto lavado de frutas y verduras: “Hay una enfermedad bien intestinal que se transmite por la contaminación fecal-oral que es la Hepatitis A, que en casos como las inundaciones pueden aparecer, pero en Argentina tenemos una vacuna por lo que no tendría que sorprendernos una situación así para reflexionar sobre ella, sino que lo tendríamos que tener incorporado porque la vacuna se agregó en el Calendario en 2005 y nos protege” explicó, señalando que se trata de una vacuna que se da por única vez a partir del año de vida: “Quienes nacieron a partir de ese año están cubiertos, pero quienes nacieron antes no. Es decir, por encima de veinte años no estaríamos cubiertos, pero muchos de nosotros podemos tener inmunidad natural por haber tenido Hepatitis A cuando éramos chicos” explicó la médica gastroenteróloga, extendiendo que aquellos que tienen más de veinte años y no saben si se aplicaron la vacuna cuando eran chicos, tomen conciencia y se acerquen a cualquiera de los Centros de Atención Primaria de Salud (CAPS) de Coronel Suárez.
En ese sentido, señaló que tener la seguridad de haberse aplicado esta vacuna sirve también en los casos de viajes o mismo, en el escenario de actualidad, de cuidado para quienes están haciendo traslados a Bahía a llevar donaciones o a colaborar con la causa.
Si bien esta patología tiene síntomas, muchas veces son inespecíficos: “A veces el paciente tiene decaimiento, fiebre o diarrea, síntomas que pueden acompañar a cualquier virus; pero otras veces hace una sintomatología más florida, que es cuando el paciente se pone amarillo, hace pis de color oscuro y su materia fecal empieza a perder color y es más blanca. Son síntomas que alarman y en la consulta hacemos el diagnóstico” enlistó Hurtado, que insistió en la importancia de la vacunación que contribuye a que el virus no circule.
Vale destacar, como medida de prevención, siempre lavarse las manos: “Tenemos que ser conscientes de que todo lo que ingresa por nuestra boca tiene contacto con nuestras manos. Si no tenemos acceso a agua potable y jabón, el alcohol en gel salva en esos momentos; y debemos ingerir siempre agua potable -incluso para tomar mate ya que el agua no se hierve- y lavar los alimentos lavados correctamente”.
En ese sentido, señaló la entrevistada que la buena alimentación cobra mayor relevancia ya que no es lo mismo que el virus encuentre a un paciente mal nutrido: “Todas las cosas que abordamos en cuanto a alimentación y salud nos ayudan cuando padecemos alguna enfermedad. Aprendimos eso con el COVID porque las personas que mejor estaban respondían mejor cuando se encontraban con el virus, y hoy es lo mismo”.