“No es que hay que eliminar totalmente el consumo de azucares y de sal, pero que no sea habitual para tomar consciencia y hacer un cambio”

En La Nueva Radio Suárez consultamos a Lucía Rodríguez Hoffman para que brinde una serie de recomendaciones a la hora de alimentarnos. 

Sobre el consumo de azúcar, la Licenciada en Nutrición indicó que “es una sustancia adictiva y hay gente que no puede dejar de ponérselo a las infusiones, y esto es complicado porque a largo plazo pueden desarrollar enfermedades como la diabetes y luego les cuesta bastante volver a sus formas orgánicas de ser saludable. Hay que cortar a tiempo este hábito que no es bueno. El azúcar agregado está en casi todos los alimentos ultraprocesados, como las galletitas, los postres, sobre todo los que compramos en los supermercados, y puede estar en los chocolates y en las facturas. No es que hay que eliminar totalmente estos consumos, pero que no sea habitual para tomar consciencia y hacer un cambio”.

En relación a lo salado, la profesional dijo que “la sal también es adictiva, sobre todo si comes productos que contiene alta cantidad, es como que lo necesitas todos los días. En mis pacientes veo mucho que están acostumbrados a comer picadas a diario, antes de las comidas, y además de consumir más sodio del recomendado, después se hacen una ensalada y en vez de ponerle un poco de sal le echan una cucharada entera porque no le sienten el gusto”. 

Esto pasa igual con lo dulce, “y al comenzar una dieta sustituyen el azúcar con edulcorantes, haciendo que el umbral sea muy alto porque son muy dulces. Cuando se empieza una alimentación realmente saludable se eliminan estos azucares, o los comes en muy bajas cantidades, y capaz que no sentís sabor al alimento. Entonces, es mejor ir reduciéndolo de manera gradual para que se vayan adaptando y sentir el sabor original”.

Consultada por el hábito de consumir algo dulce después de almorzar o cenar, y cómo reemplazarlo, Lucía Rodríguez Hoffman dijo que “lo mejor sería dejar de comprar estos alimentos, sobre todo si están a mano en la heladera, como un helado o chocolates; y el día que quieras comer algo dulce lo compras pero de manera puntual, no eliminarlo por completo. Otro de los motivos por los cuales caemos en estos hábitos es que no combinamos los alimentos en el plato de forma adecuada”.